Pr. Eduardo “Sufrimiento en la cruz” Salmos Capítulo 22
Este Salmo ofrece una descripción grafica de la muerte por crucifixión de nuestro Señor Jesucristo, tal vez el Cristo que a ti te han presentado en algunas religiones aparece ahí un Cristo crucificado con una corona de espinas verdad, su cabeza caída hacia un lado y con una huella en sus costillas manando sangre donde le ensartaron una lanza o usted ha visto una película probablemente en donde nos muestran similar a lo que le estoy graficando
Quiero decirles que lo que Jesús, sufrió por Ud. Y por mí, no es lo que les acabo de manifestar; en alguna pinturas también lo colocan de esa manera hay algunos escultores que también lo representan de esa forma con su cabeza caída hacia un costado y la huella de una lanza encertada en sus costillas y además una corona de espinas. Pero la palabra de Dios dice en el salmo 22 versículo 12:
¿Qué le parece?, todos los huesos de Jesús se descoyuntaron, probablemente a Ud. algún día ojala que no, se le fracturo un hueso
En lo personal hace más de 20 años atrás sufrí la fractura de un hueso en un pie, pise un piedra, se me fue hacia el lado con el peso de mi cuerpo, me llevaron a un clínica estuve casi 1 mes enyesado, sufriendo los dolores, inherentes de esa fractura, de un huesito del pie, uno, pero dice la palabra de Dios que a Jesús, lo golpearon tanto, tanto y con tal violencia que todos sus huesos se descoyuntaron, todos.
La palabra de Dios dice “Mi corazón fue como cera, Derritiéndose en medio de mis entrañas.”
Fue tanta la golpiza que le dieron que su corazón se reventó y se derramo por entre sus entrañas, como cera dice, ósea que desapareció el corazón del Señor, fue derramado interiormente.
Agrega la palabra de Dios “Como un tiesto se secó mi vigor, y mi lengua se pegó a mi paladar, y me has puesto en el polvo de la muerte.
”Jesús estando con todos sus huesos descoyuntados con su corazón reventado, se deshidrato y el vio acercarse la muerte física
En el versículo 16 el salmo 22 dice “Porque perros me han rodeado; Me ha cercado cuadrilla de malignos; Horadaron mis manos y mis pies.”
Y ponga atención en lo siguiente, dice “Contar puedo todos mis huesos”; ósea lo golpearon tan fuertemente que los huesos salieron de su piel todo eso sufrió Jesús por Ud. y por mí.
Dice “Entre tanto, ellos me miran y me observan.” Todos observaban allí a Jesús, agrega “Repartieron entre sí mis vestidos, Y sobre mi ropa echaron suertes.”, se pusieron a jugar ahí a los dados haciendo suerte, haciendo apuestas.
Dice “Mas tú, Jehová, no te alejes; Fortaleza mía, apresúrate a socorrerme. Libra de la espada mí alma, Del poder del perro mi vida. Sálvame de la boca del león, Y líbrame de los cuernos de los búfalos.”
Jesús estaba en la indefensión extrema, cuando Jesús fue a orar allí al monte de los olivos, existe un sector dentro de ese monte, se llama Getsemaní, significa en hebreo prensa de aceite. Allí cuando hizo la última oración Jesús; por Ud. por mí y por todo el mundo, antes de ir a la cruz a sufrir lo que estamos viendo aquí a la Luz de la Palabra.
En el Getsemaní Jesús fue apretado verdad por Dios, por amor a cada uno de nosotros, y aquí Dios nos está mostrando el grande sufrimiento a través de su palabra, el grande sufrimiento que Cristo padeció por todos nosotros
Dice la palabra de Dios que le reitero; los huesos de los brazos, las manos, los hombros y la pelvis fueron descoyuntados, recordemos dice “el sudor abundante causado por el intenso sufrimiento”, el daño sufrido en el corazón, la perdida de toda fuerza, la sed extrema que tenía
Sabemos todos, las manos y los pie, traspasados por clavos, la ofensa que sufrió producto de la desnudez parcial que le hicieron que le sacaron casi toda su ropa eso era una ofensa, en su época todos estos sufrimientos que acompañan la muerte por crucifixión.
Así que ya sabe, si Ud. creía que Jesús solamente había sido clavado allí en la cruz con 3 clavos y le habían puesto una corona de espinas, la corona de espinas en los estudios de teología se concluye que cada espina media aproximadamente 5 cm, haga la prueba Ud. de clavarse con una espinita en la mano le va a doler harto ¿cierto? Claro, pero Jesús soporto espinas de aproximadamente 5 cm cada una en su cabellera allí, todo esto por amor, por amor a Ud. por amor a mí, por amor a todo aquel que quiere ser salvo aquí en este mundo.
Desconozco cuál es la cruz que tu estés llevando en este día, quizás es la cruz del desprecio, la cruz del enojo, la cruz de la habladuría de otros, que te andan rodeando como rodearon a Jesús como perros, a veces hay personas que rodean a otros parecen perros, perros de casa que lo único que quieren es destruirte, es verte abajo, que te vaya mal, que cuando tu estas prosperando lo único que desean es que esa prosperidad se termine, que cuando ven alguien que Dios les está bendiciendo, comienzan la habladuría, a tal ves está traficando droga, oye no tal vez está haciendo malos negocios y levantan calumnias ¿verdad?
Desconozco cuál es la cruz que tu estas llevando hoy, pero si comparas tu cruz, el sufrimiento que tú tienes en este día, compáralo con lo que te acabo de compartir a la luz de la palabra de Dios.
Déjame decirte que lo que sufres tú y lo que sufrimos nosotros es absolutamente nada comparado a lo que sufrió Jesús por ti y por mí Alabado sea el nombre del Señor, tú tienes que ser valiente mirar a Jesús conocer al Cristo.
Ahora te estoy hablando del Cristo, Jesús es el que esta antes de la Cruz, yo ahora estoy hablando del Cristo de la Cruz ¿Dónde nace Cristo?, cuando muere físicamente en la Cruz ahí está el Cristo y cuando Cristo resucita después del 3er día de haber estado sepultado allí nace Jesucristo
Por lo tanto, amiga, amigo, hermana, hermano, para ser cristianos para ser cristianas, tenemos que conocer a 3 personas, tenemos que conocer quién es Jesús, debemos conocer quién es el Cristo que estamos presentando a esta hora y cuando sabemos quién es Cristo quien es Jesús vamos a descubrir a la luz de la palabra del señor y con el espíritu santo quien es Jesucristo, bendito es el nombre del Señor.
Un verdadero hijo de Dios, una verdadera hija de Dios debe conocer esa trilogía a veces hablamos de Jesús, hablamos de Jesucristo de Cristo, pero por desconocimiento muchas veces cometemos el error de no saber que estamos hablando gracias al Señor porque él nos está dando esta luz
Recuerde usted los padecimientos que sufrió Jesús cuando tuvo que llegar a la cruz por Ud. y por mí. Pero gracias a Dios, que cuando el inicia este salmo 22 diciendo “Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?”, era necesario, Dios padre no lo protegió porque era necesario que se cumpliese la palabra, y esta palabra aparece en Salmos en el antiguo testamento fue escrita por profeta por hombres que Dios les dio esta palabra, cientos de años antes de que sucediera la crucifixión de Jesús y hoy que esta palabra es fresca, es para siempre, es eterna es para tu vida.
Le reitero a Ud. independientemente de cual sea la cruz que Ud. está llevando, si la compara Ud., con la cruz que llevo Jesús , es la nada misma pero te tengo una grande noticia, si tu vienes a Cristo y probablemente no lo has aceptado a Él como su salvador, Él te está haciendo un llamado a esta hora, clama a mí que yo te responderé
Jesús, Cristo, abre sus brazos a través del espíritu santo y te dice ven a mi yo quiero hacer de ti una nueva criatura yo quiero cambiar tu lamento en baile quiero que andes por la vida risueña, risueño, con alegría que tengas en tu vida templanza, mansedumbre, bondad, que haya en ti amor, que ames a los que están a tu alrededor, que ames a tus enemigos, que si alguien te hace daño o habla mal de ti no haya rencor en tu vida.
Hoy día Cristo te dice ven a mi yo quiero cambiar tu lamento en baile, clama a mi yo te responderé todo lo que hice allá en la cruz fue para hoy darte vida eterna confía en mí, no confíes en el hombre, no confíes en la mujer
Jesucristo te dice, confía en mí en esta hora, ven ante mi presencia, confiesa con tus labios que yo soy tu Salvador tú Rey de reyes tu Señor de señores, yo he venido para traerte vida y vida eterna, vida de victoria para que andes de victoria en victoria
¡Alabado sea el nombre de Dios!, ¡Bendito es el nombre de nuestro Señor Jesucristo!
Dando gracias a Dios por su grande amor, a Cristo por lo que nos dio en la cruz y al Espíritu Santo porque Él hoy nos ha consolado, Amén
